Leyenda de la muerte de Hiram Abif
De entre todas las leyendas que circulan en los medios masónicos a efectos didácticos e iniciáticos, la figura y la muerte de Hiram Abif ocupa un papel central. Revisar el contenido, las implicaciones y el nacimiento de este tema, son fundamentales para encuadrar el papel histórico e ideológico de la masonería.
LIBERTAD ABSOLUTA DE CONCIENCIA
El mito masónico de
«Los Hijos de la Viuda»
Es un bello mito del esoterismo masónico, que al igual que todos los mitos, tiene la extraña función de reflejar recónditos aspectos del alma y las más alta aspiración humana.
Es a la vez una invitación y un mapa que nos conduce a lo insólito, ya que nos conduce a convertirnos en personas fascinantes y cautivadoras, así nosotros nos convertimos en la encarnación del secreto masónico.
Mitos paralelos a sus creencias y sus inclinaciones. Mitos que son de hecho uno de los mejores aspectos de los pueblos y hombres y mujeres que lo componen. Los mitos son parte relatos históricos como alegóricos. Historias que la gente primero cuenta y que muchas veces son transmitidas de generación en generación. Resulta absurdo cuestionarnos si estos relatos son históricamente auténticos o ficticios. Los mitos son reales en tanto que cumplen una función de enseñanza. El Mito de los Hijos de la Viuda, se remonta al Mito Egipcio de Isis, que era como muchos saben la Viuda de Osiris, este mito tiene más de 5000 mil años de antigüedad, y un mito que nosotros los masones hasta el día de hoy practicamos.
El mito de la Madre Viuda es donde la Masonería encuentra un espejo para reflejar sus enseñanzas y aún su rostro más misterioso. Es un espejo en donde se refleja el rostro esencial de la Orden Masónica. Ser hijo de esa Madre Viuda dice lo que somos como masones y que no es simplemente un calificativo distintivo o seudónimo. Ser hijos de la Viuda refleja lo que somos como masones, seres diferentes; elevados, transfigurados y convertidos en seres con poder, con autoridad y sobre todo, y más importante – Libres.
El mito masónico de la Viuda es la esperanza permanente del francmasón, que a pesar que si algunas veces fracasamos, nosotros los masones seguiremos intentando ponerle Orden a este Mundo, deseamos un mundo libre de opresión, injusticias, explotación, laico, democrático, con las más absoluta libertad de conciencia, sin exclusiones, sin discriminaciones. Todos los mitos son a la sociedad lo que los ánimos a los individuos; así, los mitos son las ilusiones de las personas, que nos susurran en nuestros oídos promesas de belleza, inmortalidad, orden y libertad.
Desde ese antiquísimo Mito Egipcio de Isis de casi 6 mil años de antigüedad, que quedando Viuda y que a través de una mística búsqueda devuelve a la Vida a su Marido Osiris, logrando esto no sólo devuelve a la vida a Osiris, sino que logra algo más maravillosa, así logra impregnar de esperanza a la humanidad. Así mediante los mitos la humanidad tiene aspiraciones más sublimes; el conflicto entre una persona y la sociedad en que vive son suavizados por mitos – los mitos no necesariamente mentiras sino más bien aspiraciones. Los mitos son guías: nos dicen cómo luchar, cómo sortear dudas y la perseverancia para sortear pruebas por las que se tiene que atravesarse para finalmente lograr una meta; y así trascender el caos y el aspecto más miserable de la condición humana.
En muchos textos de estudio, se nos explica que los egipcios tomaron el mito de Isis de otra civilización aún más antigua, increíblemente más antigua, por otro lado Ouspensky decía que los primeros cristianos sólo tomaron prestado el Mito de Isis y lo adaptaron al Cristianismo. Mientras que nosotros los masones tomamos el Mito de Isis y lo adecuamos al Tercer Grado de la Francmasonería, bajo el mito de Hiram Abif y los hijos de la Viuda.
El Mito Masónico de los Hijos de la Viuda, es el mapa de cómo llegar a las realidades que se describen los antiquísimos mitos del pasado. El Mito Masónico ha sido conservado hasta nuestros días para promover formas iniciáticas y acciones concretas que permitan al francmasón salir poco a poco del caos en el que estaba encadenado. Cuando el masón no logra estar a la altura del plan iniciático y por alguna razón no es capaz de actuar en consecuencia, entonces todo se convierte en un dogma y la masonería se tomará como una afirmación, o como un aula escolar, o como un lobby político. Cuando esto sucede, el mito masónico de los Hijos de la Viuda pierde su papel libertador y se convierte así en un instrumento de opresión dentro de su Logia.
Diríamos que deja de ser parte del Mito Masónico. Mientras que el mito es algo para ser vivido, el dogma es para ser simplemente ciegamente creído; el mito masónico es algo activo y el dogma incita a la sumisión. En Masonería el Mito y los Rituales están íntimamente ligados.
El Rito, la Ceremonia, es el Tiempo fuera del Tiempo, es cuando la hora no coincide con la Hora Profana. El Templo es el espacio donde simples seres humanos son transfigurados, transformados y habrán de encarnar a los seres mágicos de los que hablan las leyendas masónicas. Es el tiempo mágico en que los seres de poder, de iridiscencia, de amor fraternal y conocimiento refuerzan los lazos de unión y de amistad.